Alcatraz, notorio como uno de los penales más estrictos de la historia de Estados Unidos, ha mantenido ocultos numerosos misterios hasta el día de hoy. A pesar de su cierre en 1963, las celdas de la prisión de Alcatraz siguen siendo objeto de curiosidad para muchos entusiastas de la historia.
La Prisión de Alcatraz alojó a algunos de los criminales más peligrosos de su época, incluyendo al famoso gánster Al Capone y al temido asesino en serie Robert Stroud, conocido como el 'Hombre Pájaro de Alcatraz'. Pero esto no es todo lo que el lugar reserva. ¿Sabías que Alcatraz nunca superó su capacidad máxima de presos?
Contrariamente a lo que suele pensarse, Alcatraz no se llenó nunca hasta su límite de 336 presos. El registro más alto de presos simultáneos fue de 302, en la década de 1950. El número promedio de presos alojados en la prisión fue de alrededor de 260, con unos 50 empleados de prisiones viviendo en la isla.
De manera asombrosa, las celdas de Alcatraz, aunque pequeñas y modestas, no se consideraban las peores de su tiempo. Cada celda medía 2.7 m por 1.5 m, con un pequeño lavabo y un retrete. A pesar de la rigidez de las condiciones, hay registros de que los presos preferían Alcatraz a otras prisiones debido a sus rigurosos sistemas y regulaciones de seguridad, que limitaban la violencia entre presos.
Conocido por su aparente inescapabilidad, Alcatraz vio sólo 14 intentos de fuga durante su funcionamiento. A pesar de que ninguno fue exitoso, el más famoso es el intento de escape de 1962, protagonizado por los hermanos Anglin y Frank Morris, que hasta el día de hoy sigue siendo sujeto de debate y especulaciones.
En resumen, las celdas de la prisión de Alcatraz albergaron a algunos de los criminales más notorios de la historia. Rodeadas por el abismo del Océano Pacífico y consideradas inescapables, siguen sumidas en el enigma, atrayendo a historiadores y curiosos por igual.